Una buena e inesperada noticia: Patti preso, en celda común y con un largo porvenir tras las rejas

Aunque parezca algo difícil de imaginar, luego de tanta sobreactuación sobre su presunta inocencia, desde el jueves 22 de noviembre el ex intendente de Escobar Luis Abelardo Patti esta detenido en los tribunales federales de San Martín, acusado de haber cometido «delitos de lesa humanidad» durante la última dictadura militar. “Fue un jueves. Como si alguien hubiese advertido el valor que para todos nosotros tienen los jueves. La enorme y solidaria red que llamamos Comisión Campo de Mayo, nacida en un otoño con bastante pesimismo, tiene razones esta noche primaveral para un nuevo momento de satisfacción”, reza el saludo de ese día de uno de los tantos luchadores que repitieron el viejo refrán popular sobre la justicia: “tarde, pero llega”. Un sabio adagio que muchos genocidas impunes deberán recordar de aquí en más.

“Patti está detenido en una cárcel común gracias a los ovarios de las viejas, a los cojones de los militantes y sobrevivientes, a la aguerrida perseverancia de quienes trabajan en los organismos, en las secretarías, en los barrios; a las audaces ideas de los HIJOS, a las meticulosas querellas de los Hermanos, a los animosos escritos de las jóvenes y los jóvenes abogados – los de Abuelas, los de Hijos, los del Cels, los estatales- que tienen la misma sangre que los viejos”, recordó uno de los tantos compañeros que colaboraron para enfrentar con el peso de la verdad la impunidad con la que Patti habló todos estos años.

Gracias a la silenciosa y anónima perseverancia de organismos, abogados y luchadores, el juez federal en lo Criminal y Correccional de San Martín Nº 2, Alberto Suares Araujo, dispuso que se detenga a Patti, quien se había presentado a declarar en el marco de la causa 4012, en la que se lo investiga por el secuestro y desaparición de tres personas, en febrero de 1977.

El ex subcomisario «está detenido, acusado de delitos de lesa humanidad” y está detenido en el penal bonaerense de Marcos Paz. El ex intendente de Escobar es investigado por los secuestros del ex diputado justicialista Diego Muniz, de Carlos Souto y de Gastón Goncalvez, ocurridos en 1977.

La Secretaría de Derechos Humanos de la Nación se presentó como querellante en esa y en otras causas contra Patti, junto a los familiares de las víctimas, y recordó que «todas las querellas estaban unificadas en esta requisitoria de la detención» del ex intendente.
Precisó que «a Patti no solo lo tenemos querellado en esta causa en San Martín. También en San Nicolás, por los casos de (Eduardo) Pereyra Rossi y (Osvaldo) Cambiasso, y también en La Plata, junto con la familia Mariani».
La tardía detención de Patti es atribuible «a las leyes de Obediencia Debida y Punto final, y a los indultos del señor (Carlos) Menem» y destacó que la medida judicial fue posible «por la política de derechos humanos del actual gobierno».
En ese contexto, la Secretaría pidió su detención «hace más de dos años” y han hecho “el pedido numerosas veces, recién ahora la Justicia consideró que existían pruebas suficientes».

Las trampitas del “reo” Patti

Luis Abelardo Patti, compitió hace menos de un mes como candidato a gobernador bonaerense y esperaba que la Corte Suprema de Justicia lo habilitara a jurar como diputado nacional. El Congreso rehusó tomar juramento a Patti como legislador nacional con base en la indoneidad moral que le adjudicó a raíz de las violaciones a los derechos humanos que habría cometido, pero la Corte dijo que la Constitución Nacional no otorga al Parlamento facultades para negarle una banca a quien fue electo para ocuparla.
La Corte sentó un principio que iba a beneficiar a Patti al pronunciarse sobre un caso análogo iniciado por el detenido ex general del Ejército y ex gobernador de Tucumán Antonio Domingo Bussi.

Por eso el ex subcomisario, ex intendente de Escobar y hasta hace menos de un mes candidato a la gobernación bonaerense, aspiraba a que la Corte fallara en su favor en el litigio que promovió para asumir como diputado, lo que hubiera significado una doble victoria: con la banca, Patti obtenía inmunidad de arresto.

Pero el jueves 22, antes de que el supremo tribunal se expidiera sobre su situación particular, Patti fue detenido por su presunta responsabilidad en el secuestro y homicidio del ex diputado peronista Diego Muniz Barreto y los militantes Gastón Goncalvez y Carlos Souto.

Hace 31 años, cuando Muniz Barreto, Goncalvez y Souto fueron capturados y sometidos a torturas, Patti era suboficial inspector en una comisaría de Escobar, en la zona norte del conurbano bonaerense.

Ya en 1973, Patti fue denunciado por el triple homicidio de adolescentes que jugaban metegol en un bar de Escobar cuando fueron ultimados a balazos. Según el entonces policía, eran sospechosos de la violación de una mujer, pero las pruebas mostraron que eran ajenos al hecho.
Acusado años después por tormentos al detenido Julio di Battista, el oficial bonaerense fue sobreseído y en la dictadura prestó servicios en delegaciones de Tigre y San Martín, en la zona norte que era parte del circuito represivo que comandaba el coronel Ramón Camps.

En 1983, los militantes montoneros Osvaldo Agustín Cambiasso y Eduardo Pereyra Rossi fueron «abatidos en un enfrentamiento» con un grupo de policías de Tigre entre los que se encontraba Patti, según consignó la información oficial. Las víctimas, en realidad, habían sido secuestradas en Rosario, Santa Fe, en un operativo del aparato represivo.

En 1989, Patti ascendió a subcomisario bonaerense y desde esa función participó de la represión a militantes del Movimiento Todos por la Patria (MTP) que tomaron el cuartel militar de La Tablada, donde unos 30 activistas fueron asesinados. Al año siguiente, Patti fue acusado de torturar a dos presuntos ladrones.

Era el inicio de los ’90 y el entonces presidente Carlos Menem introdujo al policía en la esfera política al designarlo interventor en Catamarca, donde la estudiante María Soledad Morales había sido víctima de un crimen que movilizó a miles de personas en sucesivas marchas de silencio.
Desde entonces, Patti organizó su vida en torno a actividad política: fundó el derechista partido PAUFE, fue intendente de Escobar, resultó electo diputado nacional -aunque no logró asumir- y, finalmente, compitió por la gobernación bonaerense. Pese a sus antecedentes, 163.533 personas votaron por el ex policía en los comicios que ganó Daniel Scioli. Al cierre de esta edición, Patti cumplió 55 años tras las rejas.

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