La Cumbre del Mercosur celebrada en Tucumán expresó, en la declaración final de la reunión, su «rechazo» a la denominada «Directiva de retorno» y llamó a los dirigentes europeos a la reflexión, para que se efectúe una revisión y su derogación inmediata. En la cumbre presidencial, Brasil asumiço la presidencia de turno del Mercosur.
Los miembros de Mercosur -Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay, con Venezuela en proceso de adhesión- y los asociados -Bolivia, Chile, Ecuador, Perú, Colombia- han suscrito una declaración conjunta en la que manifiestan su «rechazo» formalmente y reivindican los positivos aportes de los emigrantes latinoamericanos a los países europeos.
Entre otras medidas, la directiva europea -que entrará en vigor en 2010- establece que los inmigrantes en condición irregular, incluidos los menores, puedan ser detenidos hasta por 18 meses mientras se tramita su expulsión de Europa, a donde no podrán regresar en cinco años.
Los presidentes del Mercosur condenan cualquier intento de criminalización de la migración irregular y la adopción de políticas migratorias restrictivas, en particular hacia los sectores más vulnerables, como las mujeres y los niños. Asimismo, defienden la necesidad de luchar contra el racismo, la discriminación, la xenofobia y otras formas de intolerancia.
El término «rechazo» fue incluido en la declaración del Mercosur a propuesta del presidente de Bolivia, Evo Morales, en sustitución de la versión inicial, que expresaba la «profunda preocupación» de los mandatarios por la directiva europea.
Duras críticas a la UE
Pese al cambio de última hora, el documento no recoge la dureza de las críticas que se escucharon en el pleno de la XXXV Cumbre del Mercosur de boca de prácticamente todos los mandatarios que acudieron a la convocatoria.
Morales, uno de los más críticos con el giro europeo, se ha preguntado «dónde está el alma europea» y ha pedido a sus colegas un rechazo «unánime» a la directiva comunitaria. «América ha recibido a mucha gente. Algunos acapararon miles de hectáreas de tierras, saquearon nuestros recursos naturales, explotaron a nuestros hermanos y ahora aprueban la directiva de retorno«, ha dicho.
El presidente venezolano, Hugo Chávez, también ha solicitado una respuesta contundente contra la «barbarie» de la Unión Europea. «Habría que conciliar posibles respuestas y llamar a la reflexión a los Gobiernos de Europa», ha apuntado el mandatario venezolano, recordando que su Gobierno ya adelantó una posible reacción, como la aplicación de una «ley de retorno» de las inversiones europeas en su país, aunque ha matizado: «No queremos comprometer a nadie«.
Por su parte, el presidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva, ha llegado incluso a tildar de «racistas» las actitudes de los miembros comunitarios.
Texto de la declaración contra la directiva, acordada en la Cumbre de Presidentes del MERCOSUR
En los fundamentos de la Declaración, se establece que:
«Que dicho planteo vulnera Derechos Humanos fundamentales, “criminalizando” a los inmigrantes, ya que en la misma se establece que los inmigrantes de carácter “ilegal” que residan en países de la Unión Europea (UE), tienen un plazo de retorno voluntario a sus países de origen que va de siete a treinta días y contempla, para quienes no lo acaten la retención o encarcelamiento que será de seis a dieciocho meses, entre otros factores, lo cual sin lugar a dudas significa la generalización antidemocrática de encierro arbitrario por un período indeterminado de tiempo y retorno forzoso sin posibilidad de poder volver a pisar el suelo europeo durante los siguientes cinco años».
«Que sin lugar a dudas la misma vulnera la Convención Europea de Derechos Humanos, la Carta de Derechos Humanos de la Unión Europea, Declaración Universal de Derechos Humanos, el Pacto de Derechos Civiles y Políticos, la Convención Americana sobre Derechos Humanos, el Pacto de San José de Costa Rica, entre otros acuerdos internacionales, puesto que el texto, tal como ha sido aprobado, no garantiza un retorno en condiciones de seguridad y dignidad de los emigrantes irregulares».
«Que es claro que Europa en este momento no tiene presente que durante mucho tiempo, especialmente después de la 1ª y 2ª Guerras Mundiales, el mundo, particularmente, América Latina, ha recibido y aceptado a inmigrantes que provenían de distintas partes de Europa, produciéndose durante un largo período la migración europea transcontinental como un fenómeno masivo y fue justamente América la que aceptó y efectuó el respaldo requerido en momento de las graves crisis surgidas a lo largo de todo el siglo XX, en todos los países europeos»
Una vez concluido el debate, y por el voto unánime de los parlamentarios participantes de la reunión plenaria en Tucumán, aprobaron la declaración que sostiene:
DECLARACIÓN
– 1.- Su rechazo a la denominada «Directiva de Retorno» que constituye una violación a los Derechos Humanos básicos y en particular al derecho a la libre circulación internacional, sin perjuicio que al aumentar a dieciocho meses la internación de inmigrantes sin papeles se consagra una privación de libertad al aplicarse una verdadera pena de prisión.
– 2.- Su decisión de hacer conocer a la OEA, la Comisión Internacional de Derechos Humanos, al Parlamento Europeo y al Consejo de la Unión Europea, al PARLATINO, PARLACEN, Parlamento Andino, así como a las Naciones Unidas este rechazo y convocar a todos los Parlamentos de Latinoamérica para sumarse a esta posición y transmitir a sus respectivos Gobiernos, la necesidad de tomar las medidas correspondientes desde el punto de vista del derecho internacional.
– 3.- Su decisión de solicitar el Consejo del Mercado Común del MERCOSUR las medidas necesarias tendientes a que se efectúe una revisión y derogación inmediata de la «Directiva de Retorno» dictada por la UE.
– 4.- Su esperanza en la capacidad del Parlamento Europeo de rever, con base en los valores civilizatorios de Europa, esa decisión equivocada y estéril que mancha la imagen de la Unión Europea.
