Los atentados "low cost" y el resurgimiento de Al Qaeda, el terrorismo se convierte en una "guerra de marcas" forjada en los subsuelos de la geopolítica.
Del ejército libanés a Hizbulah y de Rusia a Estados Unidos, el mapa de la guerra en Medio Oriente traza algunos contornos, acuerdos y estrategias inesperadas.
Por la carencia de una política consistente el presidente norteamericano avala decisiones de los militares que pueden tener consecuencias desastrosas para el mundo.