El video de la última asamblea del colectivo de intelectuales fue amplificado por el multimedios con el objetivo de mostrar el ejercicio del debate crítico (cuya supuesta inexistencia le endilga al kirchnerismo permanentemente) como una fisura en el apoyo a la fórmula Filmus-Tomada. La respuesta.
Carta Abierta es un grupo de discusión e intervención política formado durante el conflicto con la Mesa de enlace. Desde sus comienzos impulsó un funcionamiento centrado en el debate y la reflexión asamblearia y la producción de textos colectivos. Acompaña al gobierno nacional con una palabra autónoma y un compromiso decidido. Desde 2008 ambas cosas se han profundizado: el compromiso con políticas de gobierno que se fueron sucediendo -desde la estatización de fondos de las AFJP hasta la asignación universal por hijo; desde la Ley de servicios de comunicación audiovisual hasta el matrimonio igualitario- y la autonomía de la reflexión desde la cual se enuncian esos compromisos. La defensa y el entusiasmo no están reñidos con la independencia crítica. Ningún otro espacio político de la Argentina tiene la potencia del kirchnerismo, por eso en ningún otro se debate de los modos en que se lo hace en este movimiento. A diferencia de lo que sucede en un bloque mediático opositor que profundiza una homogeneidad autoritaria, incluso en el modo en que recupera la palabra ajena, el kirchnerismo es el espacio político con más potencia productiva y crítica.
Ese ejercicio crítico resulta necesario, en la actual coyuntura, para analizar los alcances de una derecha autóctona que apela al supuesto fin de la política y a una engañosa concordia de notable superficialidad que lleva encriptada la violencia social, el despojo y la desigualdad bajo el alegre borramiento de todas las tradiciones populares de lucha por una sociedad más justa. Esta embestida cuenta con poderosos dispositivos ideológicos y comunicacionales que tergiversan estas tradiciones y amputan la posibilidad de recrearlas de manera imaginativa, volviéndolas contra el conjunto social de manera envilecida y antipopular. Ante esta realidad, que excede incluso las urgencias de la hora y puede proyectarse en el tiempo, es imprescindible una tarea de crítica abierta y democrática acerca de aquellos aspectos del ejercicio de lo político, para desentrañar las raíces de ese riesgo.
Hoy, ante una difícil segunda vuelta en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Carta Abierta multiplica los empeños para fortalecer decididamente la fórmula Filmus-Tomada por entender que comprende un proyecto de sociedad más igualitario, signado por los principales logros y avances del gobierno nacional desde 2003 y, por tanto, capaz de atender los problemas más acuciantes de la realidad porteña. Y lo hace convocando a todos aquellos que, desde distintas perspectivas y disidencias, consideran que es necesario evitar que la ciudad siga en manos de una política segregatoria y excluyente.
Ciudad de Buenos Aires, 19 de julio de 2011.