Miles de palestinos y palestinas se encuentran encarcelados arbitrariamente en las prisiones de Israel, donde no se respetan los derechos más básicos estipulados por las leyes internacionales.
La ajustada reelección de Benjamin Netanyahu marca el pulso de un país que se mantiene en tensión política en medio de un antiguo pero activo polvorín. Equilibrio extremo, la vía ortodoxa y el factor corrupción.
La imagen partida entre los festejos en Jerusalén por la inauguración de la nueva embajada de EE.UU. y la represión en la Franja de Gaza cristalizó el nuevo escenario de un viejo conflicto.
Argentina se abstuvo de condenar a EEUU en la ONU por reconocer a Jerusalén como capital de Israel y cambió una posición que mantenía desde hace medio siglo en la región.