Ambas son militantes del Movimiento Evita y candidatas de Frente de Todos en las elecciones del próximo domingo. Expresan voces y recorridos de vidas desde las periferias. Son mujeres de los Movimientos Populares que hoy pujan por abrirse espacios en las disputas electorales y de poder institucional. Cecilia Barros es de Villa Soldati, profesora de nivel primario, responsable de Mujeres de su organización en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y este 14 de noviembre verá si logra transformarse en Diputada Nacional. Milagros Moya es abogada especializada en cooperativismo, concejal en su Lobos natal, y está involucrada en la Direccion Nacional de Cumplimiento y Fiscalizacion de Cooperativas y Mutuales y el domingo buscará ser elegida como Diputada de la provincia de Buenos Aires. En este diálogo analizan la coyuntura, pero también, plantan bandera respecto de la importancia que tiene la participación de las mujeres de los sectores populares en la construcción política y no sólo en las tareas socio-comunitarias territoriales, como vienen haciendo desde hace años.
¿Cuáles serían las discusiones que las militancias como las que ustedes expresan tratarían de poner en la agenda política parlamentaria de los próximos dos años?
Cecilia Barros: en primer lugar diría que estos fueron días muy agitados, de mucho trabajo y recorridas, llevando adelante la consigna que nos planteamos a partir del resultado electoral de septiembre: escuchar. Y nos encontramos con una buena recepción por parte de los vecinos y las vecinas. Yo recorrí fundamentalmente los barrios populares, y además de escuchar lo que hicimos fue acompañar y tratar de visibilizar cuáles son las demandas allí presentes, porque somos fundamentalmente militantes territoriales y, circunstancialmente, candidatos y candidatas. Las demandas con las que te encontrás son fundamentalmente dos: inserción al empleo en relación de dependencia y reconocimiento de la economía popular, sobre todo por parte de quienes hoy organizan su propio trabajo y llevan adelante tareas en comedores y merenderos, así como también de quienes cumplieron una tarea fundamental a lo largo de la pandemia a través de las postas sanitarias; o las promotoras en prevención de la violencia de género, que dan cuenta de una realidad: el gobierno de la Ciudad está claramente ausente. Por eso las demandas tienen que ver con el reconocimiento económico de estas tareas que socialmente ya están reconocidas, e incluso institucionalmente, como es el caso de las Promotoras para la Erradicación y Prevención de la Violencia a nivel nacional. Pero nos falta avanzar en todo lo que es el reconocimiento económico para quienes cumplen una tarea socio-comunitaria, de cuidados, fundamentales en los barrios. Y, por otro lado, también estuvimos acercando herramientas del Estado a los barrios, como por ejemplo, las maquinarias y herramientas del Ministerio de Desarrollo Social de Nación; o a través del I.N.A.E.S, los subsidios a cooperativas, para fortalecer así estos espacios laborales, con el objetivo de lograr más y mejor empleo, con el objetivo de mejorar la calidad de lo que se produce. Así que nuestras propuestas tienen que ver con eso que vimos, escuchamos en los recorridos y con lo que venimos realizando desde los movimientos.
Milagros Moya: primero que nada, me parece importante destacar el papel que jugaron los movimientos populares durante la pandemia. Fue impresionante lo que hicieron y no siempre es merecidamente reconocido. Creo que nadie jamás se hubiese imaginado lo que nos pasó el año pasado. No sé si todavía somos conscientes de lo que sucedió en el mundo, de las secuelas que esto va a dejar… de lo tremenda que fue la catástrofe y el dolor profundo que nos deja, que nadie aun pudo terminar de procesar. Y nosotros, los movimientos populares, mucho menos. Porque al día siguiente que empezó la cuarentena, lo que discutimos era si hacíamos comedor a la noche o al mediodía, porque nuestros compañeros y compañeras no iban a poder ir a laburar: todos los compañeros que son albañiles, carpinteros, herreros, no iban a tener el cobro de esa semana. Nosotros, por ejemplo, en Lobos, un distrito de 45 mil habitantes, llegamos a tener picos de 1.100 viandas diarias al mediodía. Por momentos hubo mucha desesperación, profunda preocupación, miedo; mucho miedo. Y nuestros compañeros y compañeras no lo dudaron un segundo: estuvieron ahí, en la primera línea. Fue impresionante lo que hicieron los movimientos populares. ¿Por qué digo esto? Porque para nosotros la derrota de las PASO fue mucho más dura, nos dolió en el alma, porque como gobierno no pudimos dar las respuestas que el pueblo esperaba. Entonces, si bien coincido en que nadie quiere hablar más de esto, y que tenemos que dar vuelta la página, me parece que está bueno que podamos reflexionar. Por eso un poco celebro el resultado de la elección, porque fue un sacudón. Y me parece que necesitábamos escuchar más, y qué mejor que escuchar las urnas tronar. Así que creo y espero que podamos tomar ese mensaje todos y todas los que componemos el Frente de Todos, para entender en profundidad lo que tenemos que hacer, y lo que necesitamos hacer. Por eso creo que los Movimientos Populares tienen que ser los grandes protagonistas de esta etapa, cómo fueron protagonistas a la hora de atravesar la catástrofe que vivimos.
Mujeres, disidencias y economía popular
Venimos de un proceso de tres décadas de marchas por el orgullo y la diversidad; encuentros nacionales de mujeres; de mucho protagonismo de las mujeres poniéndole el cuerpo a la pandemia a través del trabajo comunitario; y también, de una oleada feminista por la legalización del derecho a la interrupción voluntaria del embarazo.
¿Cómo ven que se viene procesando en la política nacional, en el Frente de Todos, estos emergentes que ya llevan décadas, pero que en los últimos años se han profundizado mucho más? ¿Aparece en la agenda política?
Cecilia Barros: creo que venimos de años de conquistar muchos derechos con nuestra herramienta de lucha fundamental que es la calle. Conquistamos el derecho por el aborto legal, seguro y gratuito, también avanzamos con la Ley de Cupo Laboral Travesti Trans, pero entendemos que nos siguen faltando. El otro día una compañera decía que la Marcha del Orgullo no puede ser como ir a Mc Donald`s, ¿no?, como algo que consumimos pero que nos olvidamos de cuáles son los planteos. Y para eso es fundamental darle voz a quienes forman parte de estos sectores, a quienes forman parte del feminismo, pero fundamentalmente, a las compañeras del colectivo LGTBQI+. Y bueno: que sean también parte de la representación política. Yo creo que ahí todavía tenemos una deuda. Y si bien formamos parte de las listas muchas feministas, muchas compañeras lesbianas, travestis, trans y no binarias no, hoy no estamos en lugares centrales. Entonces, nos debemos repensar las listas para el 2023, para que sean la expresión más genuina del pueblo, no solamente respecto de integrantes del colectivo, sino también para que más compañeras y compañeros de los sectores populares tengan espacios. Porque si algo nos enseñó el feminismo es la inter-seccionalidad y cómo las distintas opresiones se cruzan y profundizan la desigualdad social. Entonces no es lo mismo ser mujer pobre que rica; no es lo mismo ser mujer pobre y travesti-trans; no es lo mismo ser pobre-travesti-trans que ser pobre-travesti-trans y migrante. Nos debemos esa reflexión. Y también, construir expresiones genuinas del pueblo. Porque sabemos bien que fue durante el primer peronismo, como dice Emilio Pérsico, cuando contamos con la expresión más genuina del pueblo, y cuando se conquistaron más derechos. Entonces, me parece que también lo que nos pone sobre la mesa el feminismo es eso: que hay que empezar por les últimes para llegar a todos, y construir políticas focalizadas que den respuestas de manera integral. Me parece que esa es la enseña más grande que al menos yo, como feminista, tengo. Y también es importante que discutamos no solamente cómo se van cruzando estas opresiones sino como vamos construyendo políticas focalizadas que den respuestas a distintos problemas, y otorguen un piso de igualdad. Creo que las políticas universales son necesarias porque igualan en oportunidades pero también hay que entender que hay personas que empiezan diez pasos atrás y para eso se necesitan políticas focalizadas.
Milagros Moya: es impresionante todo el trabajo organizado por los Movimientos Populares. Es una generación de trabajo muy profundo, desde donde además damos debates, en cada distrito, en cada rincón de la provincia. Te doy un ejemplo: en Lobos, el distrito del que yo vengo, tenemos polos de producción agroecológica en el que trabajan principalmente mujeres, te diría absolutamente mujeres, que se han organizado, y que producen alimento… alimentos libre de agrotóxicos además, de manera sostenida, permanente. Porque ahí la tierra hay que regarla todos los días, la verdura hay que trabajarla todos los días. Nosotros tenemos una gran capacidad productiva, una gran capacidad de desarrollo y tenemos la posibilidad y también tenemos muy planificadas las maneras de hacerlo. Muchas veces necesitas articular para poder materializar el trabajo de manera más concreta y más efectiva. Y muchas cuestiones serían mucho más fáciles de llevar adelante si tuviésemos acciones más efectivas por parte del Estado. Por ejemplo: toda la verdura que se compra en todas las escuelas, en los hospitales, se podría comprar a cooperativas de la economía popular; verduras libres de agrotóxicos, producidas por mujeres y disidencias, y por hombres también, claro. ¡Qué importante sería que esa producción fuera organizada por cooperativas de todo el territorio nacional! ¿Qué importante sería que esas cooperativas tuvieran las herramientas de formalización suficientes para poder garantizar derechos de acceso a la seguridad social, al sistema de salud de manera efectiva! Me parece que están las herramientas, nosotros las estamos generando, es cuestión de tomar las decisiones de profundizarlas, y me parece que estamos en ese camino, y que nuestro avance como movimientos sociales hacia la política en el estado tiene que ver con eso. Nosotros tenemos muy claro cuáles son nuestros objetivos. En Lobos, por ejemplo, nosotros hicimos acuerdos con privados, para que la tierra que producimos en tierras privadas tengan comodatos con la organización. Me parece que hay estrategias que hoy se están generando y que gestan poder para que aquellas apuestas que alimentan a nuestro pueblo, puedan ser mucho más estructuradas, más efectivas. Entonces, si tenemos voces parlamentarias, más voces que puedan expresar esto que hacemos todos los días, podemos avanzar más, comercializar nuestros productos de manera directa por ejemplo. Y acá insisto con la sustentabilidad municipal. Si nosotros, mínimamente, el pollo, el huevo, el cerdo y la verdura que necesitamos lo producimos en nuestros municipios, sería muy bueno no solamente para generar trabajo y empleo, sino también para poder evitar muchas cuestiones que tienen que ver con el daño ambiental, con el transporte… Entonces: es fundamental poder ver, efectivamente, lo que vamos a producir y de qué manera, en cada municipio. Me parece que son experiencia que los Movimientos Populares venimos llevando adelante, y que nos debemos el debate de cara al Frente de Todos para poder nacionalizarlo ¿no? Estas experiencias que claramente son generadoras efectivas de poder y que pueden ser muy positivas para el país en general. Necesitamos que estas experiencias sean parte de un debate nacional, que se pueda visibilizar lo que ya está sucediendo; eso es agregarle valor si se quiere.
El porvenir es largo
Para finalizar les quería hacer una pregunta a cada una. Porque estamos en un contexto preelectoral en donde se juega mucho más que la elección de una determinada cantidad de representaciones parlamentarias. De algún modo, están en juego los sentidos de la pospandemia, que no se pueden escindir a su vez de los resultados de las elecciones del domingo.
Entonces: ¿qué se visualiza en el horizonte? Y, ¿qué decirles a quienes lean esta conversación?
Cecilia Barros: bueno, pienso que no hay futuro posible si no hay una negociación de la deuda que tenga como eje el desarrollo económico y que tenga como eje cuidar a la sociedad, ¿no? Nos dejaron con 57 mil millones de dólares en deuda, la apertura de las importaciones hicieron que cierren muchísimas PYMES, entonces, me parece que eso debe ser parte del análisis actual. Por supuesto que la pandemia profundizó la crisis económica, y por eso hoy tenemos que acelerar lo que vinimos a hacer en el 2019, con decisión política, arriesgándonos. En ese sentido, me parece que tenemos que pensar una economía que contemple la transición energética, que contemple la mitigación del calentamiento global; una economía que tenga como eje una perspectiva feminista, que entienda las desigualdades sociales; una economía que contemple la Economía Popular. Y bueno, construir políticas focalizadas, como bien decía, tiene que ver con entender las desigualdades vinculadas al acceso a la educación, a la salud, a las posibilidades habitacionales, necesitamos construir políticas concretas para todo esto. Porque sino se nos impone la inmediatez, la individualidad, que se reforzó en el marco de la pandemia, que se reforzó cuando nos aislamos, cuando estuvimos todo el día con el celular, con la computadora, quienes pudieron, porque quienes no, quedaron totalmente aislados de la sociedad. Entonces, hay que romper con la cultura de la inmediatez y del individualismo y para eso se necesitan políticas públicas que acompañen y que fortalezcan estos proyectos de vida, porque para soñar tenés que tener la posibilidad de concretar lo que soñás, si no terminás empujado una vida sumamente violenta de un sistema que te enferma. Así que diría que tenemos muchos desafíos, y para eso, este 14 de noviembre, tenemos que dar vuelta la elección. Porque no da igual quien nos gobierna, no da igual un gobierno de ajuste, de endeudamiento, de exclusión que profundiza las desigualdades sociales a un gobierno que se preocupa por los argentinos y las argentinas, que pone como eje la vida, que pone como eje el trabajo, que pone como eje la salud, que pone como eje la educación. ¡Es de la mano del peronismo y con la unidad del Frente de Todes que vamos a generar las transformaciones que necesitamos!
Milagros Moya: a quienes nos lean les digo que es puerta por puerta, es casa por casa que tenemos que salir a enamorar, a convencer que nuestro proyecto es el mejor. Eso es lo que estamos haciendo. Como dijo Néstor Kichner, hagamos una demostración de conciencia y salgamos a buscar a aquellos que no fueron a votar, a aquellos que no están convencidos, a aquellos que están desencantados, y que tienen razón, y digámosles que los vamos a escuchar. Y dejemos de mirar tanto las redes, salgamos a hablar realmente con nuestros vecinos. Lo que realmente tiene de bueno nuestra inscripción en Movimientos Populares es que no necesitamos ir a presentarnos, porque en nuestros barrios los vecinos saben perfectamente quienes somos, donde estamos, nos conocen, esas son las veredas, las calles, las zanjas por las que caminamos todos los días. Tenemos mucho camino por delante, y mucho compromiso que profundizar, eso está clarísimo. Por eso vamos a hacer todo lo posible de cara al 14 y sobre todo después, para hacer lo que hemos hecho siempre, desde hace tantos años y que es aquello en lo que estamos pensando todo el tiempo: cómo construir una mejor patria, y en definitiva, un mejor barrio, y un mejor pueblo.