Campaña violenta

La difusión de un video de la gobernadora Vidal que exhibe un hecho de violencia de género con tono de campaña provocó una ola de repudios. La Red de Psicólogxs Feministas y el colectivo Feminacida hilaron miradas y datos a partir de un episodio que revela una política de Estado.

«¿Cuál es el límite?»

Por Red de psicólogxs feministas*

 

Desde la Red de Psicologxs Feministas repudiamos la producción mediática de la gobernadora y candidata María Eugenia Vidal, que deja al descubierto la ignorancia y malicia de quienes nos gobiernan sobre temáticas que poseen una relevancia crucial.

 

Miles de profesionales trabajamos a diario con víctimas de violencia de género en programas cada vez más definanciados, de los que vemos propaganda continuamente en medios, pero que no poseen los recursos suficientes para cumplir con las obligaciones según nuestra ley nacional 26485.

 

Nos rehusamos a aceptar que la violencia que sufrimos las mujeres y disidencias sea utilizada como elemento de campaña electoral, en un país donde se registra un femicidio cada 24hs, donde el presupuesto que destina el Estado es de $11 por mujer, y sin olvidar que esta gestión redujo el presupuesto del área mujer en provincia de Buenos Aires.

 

Como profesionales de la salud sostenemos que las mujeres y cuerpxs víctimas de violencia no necesitamos una heroína.

 

La violencia de género no se ejerce sólo a través de los agentes sociales, sino también a través de las estructuras del Estado que nos revictimizan, nos empobrecen, nos estigmatizan, nos descreen.

 

Aunque lamentablemente no sorprenda, indigna. ¿Cuál es el límite? Cuatro paros de mujeres en las calles no fueron suficientes para hacer oír nuestros reclamos.

 

En este video vemos a la víctima totalmente expuesta, aumentando su condición de vulnerabilidad.

 

El abusador denunciado anónimo, resguardado.

 

Y una «heroína» que se hace cargo de la situación… hablando con una puerta.

 

No queremos una supuesta heroína hablando con una puerta, queremos un Estado que deje de cerrarlas sistemáticamente.

 

Queremos que nuestros reclamos sean escuchados y que las políticas públicas posean la voluntad política necesaria para cambiar la realidad de mujeres y disidencias.

 

Queremos la aplicación de la ley 26485, la ley Micaela, la ley Brisa, la ley de Educación Sexual Integral, y que ninguna religión pueda imponerse sobre la legislación vigente.

 

 

* www.redpsicologxsfeministas.com

 

«La violencia no es campaña»

Por Feminacida*

A partir del vídeo institucional que se filtró de la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, le recordamos a Vidal que:

 

* Existen protocolos en casos de violencia de género y acoso.

 

* Que el #macrismo destinó $11 por víctima de violencia de género en el presupuesto de este año.

 

* Que la gestión de #Vidal privatizó la línea 144 que recibe denuncias de violencias.

 

Además, evidenciamos que la imagen de ella sosteniendo la mano de la chica es la misma que utilizó en abril, con un video en Instagram donde hablaba con la madre de la nena sobre su pymes.

 

Gracias a #Macri y #Vidal no hay inversión en protocolos de prevención y asistencia. Necesitamos que se aplique #ESI en las escuelas de la provincia.

 

Lo de Vidal es un intento desesperado de atraer votos de un movimiento que no compra las falsas promesas.

#LaViolenciaNoEsCampaña

 

*feminacida.com.ar

COMPARTÍ ESTE ARTÍCULO

Share on facebook
Share on twitter
Share on linkedin

Recibí nuestras novedades

Puede darse de baja en cualquier momento. Al registrarse, acepta nuestros Términos de servicio y Política de privacidad.

Últimos artículos

La pretensión reeleccionista del gobernador, ya sin disimulo. El quiebre de los bloques opositores. La múltiple fragmentación justicialista. Por Gustavo Castro
Claves, análisis y especulaciones que dejan entrever la posibilidad de que el senador argentino detenido en Paraguay sería una suerte de rehén para saldar cuestiones de la política interna argentina. Por Santiago Ortiz
Los pueblos sublevados del Sahel africano. Revista Zoom inaugura una serie de notas sobre los actuales procesos emancipatorios en la región. Por Carlos Mackevicius