De la Redacción de ZOOM. Hace un año que el ex gobernador neuquino Jorge Sobisch camina sobre los escombros de su ambición política. El crimen del docente Carlos Fuentealba, cometido hace un año por un policía, desató una de las movilizaciones más potentes de la sociedad neuquina e hizo añicos el proyecto de derecha que encarnaba Sobisch. El crimen fue determinante en la campaña electoral para las elecciones de octubre 2007, ya que fracturó la alianza de centroderecha que formaron junto al jefe del PRO, Mauricio Macri, y afectó la imagen del ex ministro de Educación, Daniel Filmus, por entonces candidato a la jefatura de gobierno porteña. ¿Cuánto falta para que el ex mandatario de Neuquén sea procesado por el asesinato? Un recorrido para hacer memoria, reclamar justicia y recordar que la derecha continúa agazapada esperando que la justicia no salpique a su golpeado referente.
El pasado 4 de abril, todo el país se movilizó para recordar a Fuentealba. Durante el acto central que se realizó en Neuquén, el secretario general del gremio docente ATEN, Marcelo Guagliardo, reclamó al gobernador Jorge Sapag garantías de «justicia», ya que de otro modo, dijo, «estaremos diciendo que es tan asesino como (su antecesor Jorge) Sobisch».
La dirigencia sindical neuquina advirtió que «no puede haber impunidad» en el caso que comenzará a ser juzgado en junio, cuando la Cámara del Crimen inicie el juicio oral contra el policía Darío Poblete, único imputado como autor material del homicidio.
En ese marco, Guagliardo volvió a cargar contra los responsables políticos de la represión que derivó en la muerte de Fuentealba y sostuvo que «tiene que haber un castigo aleccionador para que nunca más un gobernador se atreva a reprimir a un trabajador que reclama por sus derechos».
Dirigentes docentes también se movilizaron en Río Gallegos, Río Grande, Ushuaia, Rosario y Córdoba, y realizaron clases alusivas a la impunidad y los derechos de los trabajadores en escuelas de todo el país.
Más de 30 colectivos con trabajadores de la educación de distintas provincias llegaron a Neuquén y participaron de la marcha que se realizó en el centro neuquino.
Los manifestantes se detuvieron frente a la sede del Tribunal Superior de Justicia, la Casa de Gobierno y el juzgado del juez instructor de la causa, Cristian Piana.
Frente al Superior Tribunal, los docentes cuestionaron la labor de las autoridades porque consideran que intentaron evitar que la investigación alcanzara al ex gobernador Sobisch.
«Sabemos que es difícil, pero nuestro objetivo es que Sobisch responda por la muerte de Fuentealba», sostuvo el dirigente de ATEN Pablo Brizón.
Sandra Rodríguez, viuda de Fuentealba, dijo que «además de un homenaje a Carlos», la marcha de hoy buscaba que el gobernador Sapag «tome la decisión política de hacer justicia con todos los culpables, tanto materiales como ideológicos».
«Sobisch es el autor oculto y debe tener la misma condena del autor material Poblete», acotó Rodríguez. La viuda de Fuentealba, que también es docente, sostuvo que Sobisch «dio una orden en ese lugar, fue una acción premeditada, planeó la noche anterior lo que iba a hacer. No le bastó con robarse la provincia más rica, como lo dijo el actual gobernador Sapag, sino que llegó al punto más cínico de ordenar fusilar a un trabajador, a un maestro», añadió.»Debe haber un antes y un después» de Fuentealba, debe ser «una defensa incondicional de la vida”, dijo.