El nuevo plan de defensa de Argentina incluirá la hipótesis de guerra por los recursos naturales e integra en realidad un amplio trabajo de estudio e investigación de las Fuerzas Armadas y el gobierno, para elaborar un nuevo diagnóstico estratégico de la defensa, que estará pronto «a fines de abril o principios de mayo».
Según declaró la ministra de Defensa Nilda Garré declaró en la radio de las «Madres de Plaza de Mayo» que «la nueva etapa de la defensa lleva a tomar conciencia de la necesidad de proteger los recursos estratégicos del país frente a cualquier agresión militar externa».
Precisó, sin embargo, que los recursos naturales, si no hay agresión militar externa, son objeto de defensa a través de políticas activas y leyes específicas, por lo cual la eventual defensa militar «forma parte de un gran esfuerzo nacional de todos los sectores de la nación», incluyendo la población civil.
«En caso de agresión externa ahí vendría entonces el papel del conjunto del pueblo. Ya las guerras convencionales no son imaginables en nuestros países por la superioridad militar que puede tener una agresión externa. Hay otras formas de defensa que involucran al conjunto del pueblo», subrayó la ministra Garré, sin dar más detalles.
El proceso de revisión de la defensa, en Argentina, es impulsado fuertemente por el gobierno actual del presidente Néstor Kirchner, quien puso en funcionamiento el CODENA (Comité de Defensa Nacional), integrado por las Fuerzas Armadas y los poderes Ejecutivo y Legislativo.
«Nunca se había hecho un diagnóstico tal, porque Argentina, desde hace muchos años, no piensa en términos estratégicos. Convocamos a ese consejo y estamos elaborando ese diagnóstico» agregó Garré. Recalcó que «todavía no está terminado» y luego de ello «debe ser aprobado por el presidente Kirchner». «Ahí estaríamos en condiciones de emitir una directiva concreta de defensa desde el ministerio. Este es uno de los trabajos que estamos elaborando internamente», agregó Garré.
La ministra descartó cualquier inquietud en los países vecinos por esta cuestión. «Hace rato que las cosas cambiaron. Hay una política exterior muy definida, de cooperación, de integración con la región, con el Mercosur».
«No solamente no hay hipótesis de conflicto después de haber estado al borde de una guerra con Chile, en la década de 1980, sino que estamos haciendo una fuerza binacional para misiones de paz. Es algo inédito, porque a tal nivel de relación de las Fuerzas Armadas no se llegó en ningún país. Argentina y Chile están haciendo este ensayo de manera satisfactoria, con mucho acuerdo y muy buen clima», agregó.
También desapareció la hipótesis de conflicto bélico con Gran Bretaña por la soberanía de las islas Malvinas, ya que el actual gobierno argentino tiene una «decisión firme» para seguir los reclamos, pero solamente por la vía diplomática.
«Afortunadamente, el desastre que nos provocó la intervención de las Fuerzas Armadas en hipótesis de seguridad interior ha quedado muy atrás. La legislación es muy clara en este sentido estableciendo que las Fuerzas Armadas no pueden involucrarse en actividades de seguridad interior» concluyó.