Piden a presidente Kirchner que entregue refugio político a Apablaza Guerra

Por memoriaviva.net.-

Integrantes de la Conferencia Permanente de Partidos Políticos de América Latina y el Caribe (COPPPAL), solicitaron al presidente Néstor Kirchner, refugio político para el ex militante del Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR), Galvarino Apablaza Guerra, conocido también como «Comandante Salvador».

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En la foto: Tomás Borge
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Tras una reunión del organismo realizada en Buenos Aires, y luego de un encuentro el Martes en la Casa Rosada con el jefe de Estado, el ex comandante Sandinista y actual diputado, Tomás Borge, entregó la misiva al mandatario, a la que se adhirieron, entre otros, el gobernador de Sucre y presidente de Podemos de Venezuela, Ramón Martínez; la diputada Nidia Díaz, ex comandante salvadoreña del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional; Aurora Morales, diputada del Movimiento Quinta República (MVR) de Venezuela, y Fausto Liz, secretario internacional del Partido Revolucionario Dominicano (PRD).

La misiva dirigida al presidente Kirchner sostiene que «los abajo firmantes reunidos en la Conferencia Permanente de Partidos Políticos de América Latina y el Caribe (COPPPAL) en Buenos Aires, nos adherimos al pedido de refugio político presentado ante la República Argentina hace ya seis meses por el luchador social chileno Galvarino Sergio Apablaza Guerra, detenido en esta capital en noviembre pasado por un pedido de extradición emanado desde su país».

Los legisladores continúan enfatizando que «no nos parece casual el momento en que fue arrestado el compañero Apablaza, pues se produjo justo cuando Chile iniciaba su camino para llegar a la verdad en los múltiples casos de violaciones a los derechos humanos cometidas por la dictadura de Pinochet, y cuando el mundo comenzaba a enterarse del millonario saqueo al pueblo chileno perpetrado por el dictador.

Apablaza Guerra es un luchador internacionalista, además de un firme opositor al régimen genocida, y eso le valió tener que pagar un alto costo personal que se extiende hasta estos días».

«No tenemos duda de que esta nueva detención que afecta a este dirigente, no es más que la continuación del hostigamiento que sufre hace más de 30 años, ya que del expediente judicial no surgen fundamentos que lo comprometan en delito alguno», aseguran.

Insisten que se trata de una acusación «marcada por una ideología» que gobernó en América Latina en las décadas del ’70 y ’80, y que «cubrió de luto a este querido continente, y que en algunas instituciones chilenas sigue tan presente como entonces. Por ello en Chile no están garantizados los derechos de Galvarino Apablaza».

Concluyen sus solicitud señalando que Apablaza Guerra «ha manifestado su intención de radicarse en la Argentina, tiene tres hijos menores nacidos en este país y derechos civiles y políticos que ejercer, que por tres décadas le han sido negados sólo por el noble compromiso de resistir a la opresión.

Sabemos que Argentina ha sido y es una nación solidaria, con una larga tradición de asilo a los perseguidos del mundo, en especial de América Latina, y ese sentido, con todo respeto, pedimos no demorar una respuesta a la solicitud de este luchador social».

Texto de la carta entregada al presidente Kirchner

Los abajo firmantes reunidos en la Conferencia Permanente de Partidos Políticos de América Latina y el Caribe (COPPPAL) en Buenos Aires adherimos al pedido de refugio político presentado ante la República Argentina hace ya seis meses por el luchador social chileno Galvarino Sergio Apablaza Guerra, detenido en esta capital en noviembre pasado por un pedido de extradición emanado desde su país. No nos parece casual el momento en que fue arrestado el compañero Apablaza, pues se produjo justo cuando Chile iniciaba su camino para llegar a la verdad en los múltiples casos de violaciones a los derechos humanos cometidas por la dictadura de Pinochet y cuando el mundo comenzaba a enterarse del millonario saqueo al pueblo chileno perpetrado por el dictador. Apablaza Guerra es un luchador internacionalista, además de un firme opositor al régimen genocida y eso le valió tener que pagar un alto costo personal que se extiende hasta estos días.

No tenemos duda de que esta nueva detención que afecta a este dirigente no es más que la continuación del hostigamiento que sufre hace más de treinta años, ya que del expediente judicial no surgen fundamentos que lo comprometan en delito alguno.

Se trata de una acusación marcada por una ideología que gobernó en América Latina en los setenta y ochenta y que cubrió de luto a este querido continente, y que en algunas instituciones chilenas sigue tan presente como entonces. Por ello en Chile no están garantizados los derechos de Galvarino Apablaza.

Él ha manifestado su intención de radicarse en la Argentina, tiene tres hijos menores nacidos en este país y derechos civiles y políticos que ejercer, que por tres décadas le han sido negados sólo por el noble compromiso de resistir a la opresión.

Sabemos que Argentina ha sido y es una nación solidaria, con una larga tradición de asilo a los perseguidos del mundo -en especial de América Latina- y ese sentido, con todo respeto pedimos no demorar una respuesta a la solicitud de este luchador social.

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