Otra vez sopa: llegó la hora de los vencimientos tras el canje y aumenta el endeudamiento externo

Por Causa Popular.- A mediados de marzo, cuando el ministro de economía anunciaba con bombos y platillos el éxito del canje de la deuda con los acreedores privados, desde este medio advertíamos sobre el alto endeudamiento que aún mantenía la Argentina, principalmente con el FMI. Uno de los argumentos con los que el gobierno criticó desde el comienzo de su gestión a la menemista década del 90, fue la jerarquización de la deuda con los acreedores externos, por sobre la deuda interna con un pueblo extremadamente empobrecido. Incluso desde esta idea se produjeron duros cruces con el Fondo que exigía el cumplimiento de las obligaciones externas. Según los propios argumentos vertidos en su momento por el presidente Néstor Kirchner para justificar los recortes en los nuevos bonos emitidos para el canje, el país no se iba a comprometer a ofrecer “papeles de colores” que luego solo pueda pagar a costa de endeudarse más. Sin embargo, como muchos lo preveían, el ministro de economía salió está semana a colocar bonos por 1000 millones de dólares en el mercado, obligado por la alta deuda y los inminentes vencimientos con el FMI.

Según el propio presidente, el país ofrecía bonos acordes a su capacidad real de pago, pero nunca iba a volver a entrar en la infinita bicicleta financiera que históricamente termina con el país desvastado. Finalmente, muy poco de este razonamiento fue acompañado con la práctica.

El pasado martes 2 de mayo el Ministerio de Economía anunció el lanzamiento al mercado de nuevos bonos de deuda por 1.000 millones de pesos, casi 350 millones de dólares, en títulos Boden 2014. La colocación de estos títulos se realizó a través de una licitación y pudieron participar agentes de mercado abierto, quienes deberán tener sus respectivas cuentas en la Central de Registro y Liquidaciones (CRYL) del Banco Central (BCRA) abierta a tales efectos. La licitación tuvo como fecha límite de recepción de ofertas el miércoles 4, por lo cual el jueves 5 el propio ministro de Economía Roberto Lavagna, calificó de “excelente” los resultados de la colocación de deuda emitida el miércoles en Buenos Aires.

Hablando desde París donde se encontraba en una reunión de la Organización Mundial de Comercio (OMC), el ministro comentó a la prensa argentina que cubría el evento que “se ha más que duplicado la cantidad de ofertas” recibidas sobre los 1.000 millones de pesos ofertados, aproximadamente unos 300 millones de dólares. Las ofertas fueron por unos 2.165 millones de pesos.

La nueva emisión se realizó para afrontar vencimientos de bonos, y entre los principales compradores estuvieron bancos y fondos del exterior, no así las administradoras de fondos de jubilaciones y pensiones (AFJP) que se pensaba iban a ser los principales operadores por la cercanía que han mostrado con el gobierno cuando este se lanza al mercado financiero.

Por la licitación de 1.000 millones de pesos se pagó una tasa del 6,51 por ciento anual más el Coeficiente de Estabilización de Referencia (CER), originalmente creado para compensar a las AFJP, lo que eleva aquella tasa a aproximadamente el 15,5 por ciento. Sin hacer alusión a que la respuesta del mercado se debió a la alta tasa de interés que ofrecen los bonos, Lavagna recordó que el alto porcentaje “es muy importante ya que Argentina ha vuelto al mercado voluntario de crédito. La última colocación se hizo en febrero del 2001”.

Sin embargo, varios economistas coincidieron en focalizar en el hecho de que aumentó la deuda Argentina en 1.000 millones de pesos y que el mecanismo utilizado para financiar al Estado, es el mismo que usó el polémico ex ministro Domingo Cavallo, con resultados catastróficos.

En una de las notas publicadas en este mismo portal el 19 de marzo de este año, se sostenía que “una de las dudas para este año es si las arcas del Estado alcanzarán para mantener el pago con el organismo -en referencia al FMI- sin endeudarse. En el ministerio de economía confían en que llegarán a pagar los 11.500 millones de dólares, que se vencen en el 2005 con el Fondo y los otros organismos. Sin embargo, no pocos economistas dan cuenta que para alcanzar este monto el gobierno necesariamente deberá tomar nueva deuda ya que, aunque se mantengan variables bastante inestables como un precio internacional alto de los granos, el superávit fiscal alcanzará los 10.000 millones de pesos.

Lo que falta saldría finalmente de la colocación de nueva deuda en bancos locales y las AFJP’s especulan algunos, algo que Lavagna no desea pero a lo que puede verse obligado.”

Luego de la premonición, la nota concluía “Las negociaciones con el FMI tienen un final abierto. Lo más probable es que mientras se continúe pagando, con acuerdo o sin acuerdo, el gobierno evitará retomar el discurso de la deuda interna con el pueblo argentino, la misma que con los 11.500 millones que se proyectan pagar durante el 2005 se vería aliviada en gran parte”.

Y así sucedió, incluso con una conflictividad social que crece al calor de los conflictos gremiales por aumento de salario, una variable no tenida en cuenta en aquel momento.

Con un salario que se licua a la medida que crece la inflación que parece no detenerse, los asalariados pelean sin cuartel por lo suyo. Los estatales, principalmente, realizan una simple ecuación: mayor superávit, más plata para repartir, si el gobierno no lo hace no es porque no puede, sino porque no quiere, prefiere -continua el razonamiento- reservarse la plata para pagar la deuda externa, algo que les resulta inaceptable por lo que los paros crecen día tras día.

Pero esto no es todo. Un alto porcentaje de la deuda canjeada y la que colocó el gobierno esta semana, se ajusta por inflación. O sea que si ésta crece, no solo aumentan los precios y baja el poder adquisitivo de los salarios, sino que además también se incrementa la deuda con los acreedores internos y externos, por lo que se reduce aún más la posibilidad de incrementar los sueldos.

Un circulo vicioso donde la gran mayoría se lleva la peor parte.

COMPARTÍ ESTE ARTÍCULO

Share on facebook
Share on twitter
Share on linkedin

Recibí nuestras novedades

Puede darse de baja en cualquier momento. Al registrarse, acepta nuestros Términos de servicio y Política de privacidad.

Últimos artículos

Tucumán: “Durante días los militares se dedicaron a tapiar las villas de la ciudad y a cazar mendigos. Los subieron en un camión militar y los arrojaron en los descampados de Catamarca. La abismal desolación de esos parajes da cuenta de la crueldad de la limpieza.” Por Carlos Zeta
“Con otros instrumentos, los mismos resultados”. La pasión del eterno retorno de hundir una y otra vez a un país entero. Por Raúl Dellatorre
Santa Fe no debería endeudarse para hacer obras críticas en infraestructura de exportaciones si existiera la coparticipación de retenciones al complejo oleaginoso, que estuvo vigente desde 2009 hasta la vuelta del FMI. Por Gustavo Castro.