Mientras se prepara para participar en la celebración en La Habana del tercer aniversario de la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA) y en la que “deseo y pienso, espero no equivocarme, seguramente el compañero Fidel el día 28 o 29 de abril va a retornar a la presidencia en Cuba”, el gobierno de Bolivia avanza sobre terreno minado con su proceso de nacionalizaciones y democratización institucional. Su norte es una “revolución profunda, pacifica, democrática, a favor de los desposeídos”.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, manifestó su convicción de que el 28 o 29 de abril próximo Fidel Castro volverá a asumir la presidencia de Cuba, durante la celebración en La Habana del tercer aniversario de la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA).
«Si ha decidido el comandante y presidente Fidel realizar este acto del tercer año del ALBA en Cuba, deseo y pienso, espero no equivocarme, seguramente el compañero Fidel el día 28 o 29 de abril va a retornar a la presidencia en Cuba para seguir apoyando en temas de salud y educación a todo el mundo», expresó Morales.
La frase fue pronunciada durante un discurso en la apartada localidad rural de Monte Punku, en el departamento central de Cochabamba, a donde el mandatario viajó para reunirse con campesinos productores de papa.
El mandatario boliviano explicó que la semana pasada le llamaron de La Habana para señalar que allí se hará un acto para celebrar los tres años del ALBA y el primero del Tratado de Comercio de los Pueblos (TCP), acuerdos de los que son socios Cuba, Bolivia y Venezuela.
«Mínimamente van a haber seis presidentes de Latinoamérica impulsando estas nuevas políticas del pueblo y para el pueblo», afirmó el Mandatario.
La bolivianización de la economía del país comienza a ser realidad
“Más famoso que el dólar”, es una de las frases comunes en Bolivia para identificar a las personas, amigos o familiares más populares. Es que la moneda norteamericana manda en Bolivia. La gente ahorra y se presta en dólares. Alquileres, pensiones y muchas veces hasta el simple trueque entre amigos se hace en dólares. Los datos de la Superintendencia de Bancos muestran, por ejemplo, que las operaciones bancarias en el país, para finales de los años 90, estaban dolarizadas en un 93 a 95 por ciento. Para este mismo año, el boliviano tenía apenas un peso de cinco por ciento.
Pero a partir del año 2000 este dominio comenzó a bajar. Más aún, en los últimos cuatro años, con la inclusión de las Unidades de Fomento a la Vivienda (UFV) y luego la aplicación de un nuevo tipo de cambio, el boliviano comenzó a ganar espacio y, para el 2006 por ejemplo, las operaciones bancarias en moneda nacional bordean el 25 por ciento, mientras que el dólar perdió espacio hasta bajar al 75 por ciento. Según datos de la Superintendencia de Bancos, los ahorros en bolivianos crecen al igual que los créditos. ¿Será que ya se puede comenzar a hablar de una bolivianización de la economía? Definitivamente, estas políticas cambiarias han contribuido de gran forma a este crecimiento en créditos y depósitos en moneda nacional. Y al decir que la banca está gradualmente desdolarizando sus balances, estamos hablando de que se está bolivianizando la economía’, señala Jorge Velasco, vicepresidente Nacional de Negocios del Banco Bisa.
Las cifras muestran un constante avance de la moneda nacional en las últimas cuatro gestiones. Para el año 2003, la participación del boliviano en las cifras de la banca era de nueve por ciento, para el 2004 pasó al 12 por ciento, el 2005 llegó al 15 por ciento y para el 2006 se ubicó entre el 20 y 25 por ciento.
“Lo correcto es hablar de una creciente bolivianización; seguramente estamos todavía muy lejos del nivel de uso de la moneda local que tienen los países vecinos. Es lógico que, a medida que los bancos reciban depósitos en moneda local, también hagan préstamos en la misma moneda. Adelante”.
Evo denunció persecución de algunos medios de comunicación bolivianos
Pero mientras esos frentes continúan abiertos y el saldo sigue a favor del gobierno popular, Evo afirmó que se siente perseguido “permanentemente” por algunos medios de comunicación, pero agregó que aguantará “con paciencia” sus exageraciones y acusaciones.
“Nuestra tarea no es oculta ni reservada”, dijo el mandatario boliviano al denunciar las persecuciones que dijo sufrir y que prometió soportar “confiado en que el pueblo es sabio”.
Morales saludó, en cambio, las recomendaciones de periodistas “que permanentemente observan con razón”, durante un acto en La Paz para homenajear a Eduardo Abaroa, héroe boliviano de la Guerra del Pacífico contra Chile, en la que este país perdió su salida al mar hace 128 años.
El pasado día 14, el presidente acusó al diario La Razón, editado en La Paz por el grupo español Prisa (el mismo dueño de El País de Madrid, cuyos editoriales critican también al presidente ecuatoriano Rafael Correa) de mentir y desinformar, y sugirió que podría nacionalizarlo.
“Algo recuerdo de quién es este periódico para mentir permanentemente. Alguna información me dice que (los propietarios) son algunos españoles. Si son españoles, hasta pienso nacionalizar”, señaló Morales con una sonrisa al final de su frase.
Según La Razón, una redactora y un fotógrafo de ese medio, y el conductor que les llevaba, recibieron “insultos, pedradas, violencia sicológica y amenazas” el jueves pasado en Patacamaya, una localidad del altiplano andino situada a 109 kilómetros al sur de La Paz.
El rotativo precisa que cientos de campesinos los atacaron con gritos de “La Razón es mentirosa, como ha dicho el Evo”. Por ello, el diario advierte que tomó la decisión de no cubrir aquellos hechos informativos en los que la integridad de sus periodistas corra peligro y donde el ejercicio periodístico no está garantizado.
La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) afirmó, durante su reunión semestral en Colombia, que en Bolivia las tensiones entre el Gobierno y los periodistas son “evidentes” y que Morales “manipuló las protestas callejeras que incluían entre sus blancos a los medios privados de comunicación”.
Morales replicó a la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) que es “falso” que no respete la libertad de información, y agregó que en Bolivia los medios incluso pueden “discriminar” y “acusar falsamente”.
Cambios en YPFB: “La corrección de los errores serán la madre de las victorias”
El mandatario boliviano admitió que ordenó el relevo de Morales Olivera porque se comprobó errores en los contratos petroleros. «Por eso este cambio oportuno para mejorar nuestros errores, los errores serán la madre de las victorias», agregó. Así destacó el aporte que hizo el ex presidente de YPFB, quien encabezó a un equipo de negociadores que lograron 44 nuevos contratos con 12 petroleras extranjeras que operan en Bolivia.
No obstante, existieron fuertes presiones de sectores políticos de la oposición, y sobre todo de los medios de comunicación para la destitución de Morales Olivera.
En los 14 meses de gobierno de Evo Morales se ha relevado por diversos motivos a tres presidentes de la estatal YPFB: Jorge Alvarado, Juan Carlos Ortíz y Manuel Morales Olivera.
«Vengo a trabajar por Bolivia y este es un tremendo reto porque no debemos parar este proceso de la nacionalización de nuestros hidrocarburos que se ha iniciado en mayo del año pasado», dijo Aruquipa, el cuarto hombre en acceder a la presidencia de YPFB.
Morales y Aruquipa pidieron al Congreso boliviano dar curso la próxima semana a una ley de enmienda para la vigencia plena de 44 contratos con 12 petroleras extranjeras.
La Asamblea Constituyente
Frente a los múltiples cuestionamientos por el tiempo perdido y las trabas existentes, el MAS salió a garantizar que el 6 de agosto Bolivia tendrá una renovada Carta Magna. Es que el viernes 9 de marzo se dio fin a las exposiciones de los diferentes partidos acerca de la «Visión de país», la primera de las 21 comisiones que se van discutir en el transcurso de la Asamblea constituyente. En la «Visión de país», los partidos exponen a grandes rasgos su perspectiva de nación y de estado, además de trazar las líneas económicas y educativas que esperan que incluya la nueva Constitución Política del Estado boliviano.
Desde agosto de 2006, cuando se da inicio a la asamblea, los partidos tradicionales exigen la aprobación de cada artículo de la nueva constitución por el método de los 2/3 de los miembros de la asamblea, mientras el MAS proponía un sistema de aprobación por mayoría simple (reservando el método de los 2/3 para la aprobación final de todo el texto constitucional).
Luego de haber cedido en la puja por los 2/3, el MAS pretendió revertir la imagen de debilitamiento al interior de la Asamblea al exponer su Visión de País: Con Cholas desparramando hojas de Coca en el estrado, agitando banderas bolivianas y wiphalas (bandera de la unidad indígena) hicieron su entrada los expositores Masistas (del MAS) llenando de color y mística al teatro Gran Mariscal, sede de la Constituyente.
El MAS expuso una Visión de País que entró en contraposición con las exposiciones de los partidos tradicionales; el punto neurálgico del discurso masista fue la propuesta de crear un Nuevo Estado Social, Unitario y Plurinacional.
Si bien la exposición masista tuvo como interlocutores privilegiados a los Movimientos Sociales, al abordar el tema de las autonomías mantuvo un discurso permisivo y de no confrontación hacia los reclamos de la derecha.
La asamblea constituyente es uno de los ejes centrales del Gobierno del MAS, ya que fue una de las principales reivindicaciones de los movimientos sociales tras los sucesos de octubre de 2003: «Nosotros los pueblos indígenas preocupados por la actitud de los partidos tradicionales hemos venido a la asamblea constituyente para que tomen en cuenta nuestras inquietudes», expresó Adrián Aspi Cosme, Alcalde indígena por la sexta región municipal de Provincia Ingavi, La Paz, presente en la exposición del MAS, en representación del CONAMAQ (Consejo nacional de ayllus y markas del Qullasuyu), uno de los movimientos sociales que apoyan al gobierno de Evo Morales.
Los movimientos buscan garantizar que sus reclamos se tengan en cuenta mediante una propuesta de constitución que presentaron en las comisiones: «Estamos visitando a todas las comisiones presentándoles nuestro pliego de 15 sugerencias, tenemos hoy aquí personal designado en comisión ya que no hemos podido venir muchos».
Una de las comisiones más pobladas y disputadas es la de Autonomías, donde participan 25 constituyentes (en su mayoría masistas); las autonomías departamentales se han convertido en el principal reclamo de la derecha.
Los prefectos (gobernadores) de los departamentos ricos que conforman la llamada «media luna» (Pando, Beni, Santa Cruz y Tarija) buscan obtener independencia económica para administrar los recursos de dicha región, donde se encuentra la mayor cantidad de reservas de hidrocarburos; dicho reclamo, además, contiene una base racista y separatista con respecto al sector andino-originario.
«Nosotros proponemos que no haya autonomías departamentales sino autonomías regionales o municipales para que podamos tener una administración directa que sea beneficiosa para toda la población. Cuando se habla de autonomía departamental se quiere poner una autonomía entre la nacional y la municipal, y para nosotros no es correcto que haya una intermediación, queremos tratar directamente con la autoridad municipal y que esta trate con la autoridad nacional», explicaron los masistas.
Si bien la propuesta de autonomía de los pueblos originarios reivindica la descentralización administrativa, tiene como prioridad a la solidaridad entre departamentos para compensar las desproporcionadas riquezas geográficas.
«Las autonomías departamentales son una excusa que manejan los de PODEMOS (principal partido de derecha), ya que nosotros hemos sido autónomos regionalmente siempre, hace 500 años que ejercemos una autonomía que se basa en el respeto mutuo».
El proceso encabezado por Evo Morales parece enfrentar bien, hasta el momento, este año clave para su consolidación o fracaso como proyecto político de cambio en Bolivia. Sin prisas, pero sin pausas, con el acoso permanente de la reacción, de los estadounidenses y la prensa local, paso a paso va avanzando en el proceso de nacionalización de la economía, de cambios institucionales mediante la Constituyente, con errores que mejorar que “serán la madre de las victorias”. La revolución profunda, pacifica, democrática, a favor de los desposeídos, según la definición de Evo Morales, parece bien encaminada a pesar del poder y la cobardía de sus enemigos.