Se acrecienta el malestar entre los productores rurales Correntinos a consecuencia de que hasta el día de hoy el gobernador Gustavo Valdés no ha entregado en su totalidad los fondos enviados desde Nación en concepto de subsidios para asistencia por emergencia a quienes fueron afectados por las sequías y/o incendios sufridos durante el último verano, y que por una cuestión de orden institucional debieron canalizarse entre el estado nacional y los productores con la mediación del ejecutivo provincial.
A modo de contextualización: durante los meses de enero, febrero y marzo pasados, el Gobierno Nacional envió a la provincia entre aviones y maquinaria para incendios; aviones hidrantes; helicópteros; equipos satelitales; remolques; cisternas para transportar agua y piletones para acopiarla; maquinaria pesada y recursos humanos como brigadistas más su gastos de mantenimiento; y además también fondos para subsidios para los afectados, por el monto de casi 13000 millones de pesos. Sin embargo el gobierno provincial de (ECO) Encuentro por Corrientes – Juntos por el Cambio (JxC) del radical Gustavo Valdés, ha elegido una diferenciación muy particular para hacer entrega de los subsidios adjudicando la asistencia económica a grandes productores mayormente nucleados en la Sociedad Rural, algunos subsidios a medianos productores y prácticamente nada para el sector de pequeños productores.
Desde los distintos rincones de la provincia, desde casi la totalidad de sus departamentos y productores agropecuarios de diversas ramas afectados por los incendios, alzan la voz y reclaman que les han hecho realizar el relevamiento y empadronamiento bajo declaración jurada, y con excesivos trámites burocráticos, para no entregarles nada hasta el momento, peor aún el descontento creciente ante el conocimiento que los fondos llegaron hace meses a las arcas provinciales. Cabe aclarar que institucionalmente se debió canalizar el envío de fondos a través de nación-provincia, a excepción de los municipios gobernados por el Frente de Todos que previendo la discriminación y el manoseo del gobierno provincial pudieron lograr asistencia directa desde Nación a sus comunas.
Por caso los productores tabacaleros de Goya están evaluando cortes de ruta en reclamo ya que de 1700 productores empadronados solo 700 recibieron los subsidios. Para colmo no se comprende cual es el criterio utilizado por el ministro de la producción local, Claudio Anselmo, con el cual discrimina o descarta a unos por sobre otros a la hora de la entrega…amén del tiempo transcurrido.
Roberto Segovia, productor tabacalero de Goya, integrante de la Cámara del Tabaco, asegura:
«Esa plata ingresó a la provincia y nosotros quedamos sin recibirla (…) acá el reclamo es que de los 170 quedamos alrededor de 100 productores sin cobrar…hicimos el censo, tenemos el certificado de emergencia que retiramos del IPT (Instituto Provincial del Tabaco), o sea tenemos la prueba de que hicimos el censo y resulta que hasta ahora no nos dan el beneficio del subsidio. Pero bueno como siempre pasa acá en esta provincia, siempre se busca algún argumento tonto, ridículo, para tratar de patear la cosa para delante, buscan que uno se canse y diga: y bueno que le vamos hacer, no nos van a dar más y nos vamos a quedar tranquilos nomás. Pero se equivocan, por lo menos los tabacaleros, por más que estemos muy acostumbrados a esto, no por eso bajamos los brazos…»
Desde San Miguel, una de las zonas más afectadas por los incendios, Laureano Cardozo integrante de la mesa ejecutiva de la Federación Nacional Campesina (FNC), nos cuenta porque tuvieron que movilizar hasta la Capital Correntina, hasta las mismas puertas del Ministerio de la Producción y la Casa de Gobierno para reclamar la asistencia que Nación destinó para el sector, pero lamentablemente el ejecutivo provincial aparentemente le dio otra finalidad. Nos dice Cardozo:
«lo central por lo que nos movilizamos fue por la emergencia que padecimos todo el sector, donde la mayoría hemos perdido casi la totalidad de nuestra producción agrícola a consecuencia de la sequía, y después están también los del sector ganadero afectados primero por las sequías de las aguadas y los incendios que han afectado totalmente a sus animales, y después para colmo de repente llovió mucho y no hay pastura. Y el otro punto es que nos movilizamos hasta la Capital porque acá no nos escuchaba nadie, mandamos petitorios al municipio local y al gobierno provincial, al ministro, y nadie nos daba respuestas siendo que padecimos tres meses de incendios y de humo, y han pasado casi seis meses de esa situación y no hay ninguna respuesta, nosotros decimos que si es una emergencia debiera de estar en el momento la ayuda…».
La discriminación política tampoco podía estar ausente en esta situación, Norberto Villordo actual intendente de Santa Lucía por el Frente de Todos, localidad frutihorticola por excelencia, denuncia:
«con el tema de los subsidios para productores por emergencia el gobierno ha distribuido en todas las localidades vecinas pero en Santa Lucía todavía no, por ahí capaz que piensan que como el intendente es del Frente de Todos va a traer subsidios de Nación directamente».
Marginación desde el estado provincial para con pequeños productores también es parte de la situación, desde Perugorría, Osvaldo Galfrascoli técnico de la Secretaría de Agricultura Familiar Campesina e Indígena (SAFCI) nos relata que
«hay una ausencia tremenda del estado para el sector de pequeños productores por ejemplo acá en Perugorria ahora con la emergencia todavía ni el 50% de los pequeños productores han podido cobrar el subsidio, sin embargo los productores más grandes los que accedieron a través de los bancos ya están todos financiados con plata por supuesto de Nación».
Cesar Acevedo, diputado provincial por el Justicialismo afirma con vehemencia que
«otro sector muy castigado en nuestra provincia son los pequeños productores, se ha hablado y se ha escuchado mucho de la ayuda que le gobierno nacional ha enviado a nuestra provincia con subsidios millonarios y recursos de distinta índole a través de distintas carteras nacionales y sin embargo en cada una de las localidades de nuestra provincia los pequeños productores no han visto ni una sola gota de esos recursos, es una cuestión importante a resaltar y exigir porque tanto se habla desde el gobierno provincial sobre el sector pero al momento de efectivizar el acompañamiento evidentemente al sector al que han sido destinados estos recursos no ha llegado y nos preocupa como legisladores la falta de transparencia en cuanto al manejo de los recursos precisamente porque fueron enviados por el gobierno nacional atendiendo la emergencia ígnea y la emergencia por sequía que ha azotado a nuestra zona».
Hasta aquí algunos testimonios que fundamentan las denuncias y los reclamos para que aparezcan los fondos enviados por el estado nacional para asistencia a productores que hasta el momento como pareciera ser como reza el dicho popular «comió la vaca». A todo esto se suma ahora el cierre de divisiones de grados en escuelas rurales, bajándolas de categoría, quitándoles docentes y materias para la gurisada del campo. Corrientes ha desnudado en las últimas mediciones ser una de las provincias con mayor porcentaje de deserción escolar tanto en zonas urbanas y peor aún en la ruralidad. Lo que para la gran mayoría es una crisis que amerita políticas públicas para solucionarlas y/o corregirlas, para el radical Valdés pareciera ser «una oportunidad», ya que lejos de implementar políticas que alienten y permitan la reinserción al ciclo formal de educación, el gobernador ha entendido que es una oportunidad para achicar los gastos y está ejecutando un ajuste sobre la educación en ámbitos de la ruralidad. Cuando la enorme mayoría de correntinos entendimos como un desastre y una desgracia los incendios que arrasaron más del 10% del territorio provincial, fundamentalmente zonas de humedales calcinando a su paso toda la flora y fauna de dichos lugares, el gobernador vio la veta para «otra oportunidad» de recibir fondos especiales que le permitan oxigenar a una economía crítica y nada transparente.
Para finalizar, cabe resaltar que Gustavo Valdés es el aspiracional a presidenciable, que constantemente reclama mayores fondos a Nación bajo la ya muy gastada y cada vez menos creíble estrategia discursiva de la supuesta «discriminación», siendo que los hechos reales e incontrastables indican que en lo que va del año es la segunda provincia que más asignaciones nacionales ha recibido después de Buenos Aires, con 73.839 millones de pesos durante los primeros cinco meses del 2022. Realidad que no decanta en los salarios de los estatales provinciales ni mucho menos en la salud y educación.
Y como frutilla del postre no podemos dejar de recordar que Gustavo Valdés es el gobernador que hace pocas semanas atrás desde la tribuna del canal La Nación, ante el periodista Carlos Pagni, sin ponerse colorado y sin temer ninguna imputación, alentó abiertamente a la evasión y al contrabando cuando textualmente dijo que era más redituable contrabandear la soja a declararla y pagar por el derecho a exportación. Franca y clara apología a delitos que apuntan a desfinanciar el estado, al cual día tras día le reclama que envíe más fondos…sin remate.